El Dogo de Burdeos, también conocido como Mastín Francés o Bordeaux dog, es una raza de perro originaria de Francia. Tiene sus raíces en la región de Burdeos. Su historia se remonta a varios siglos, donde se utilizaba para una variedad de propósitos, incluidos la caza, el pastoreo y la protección de la propiedad. A lo largo de los años, la raza se ha especializado principalmente en funciones de guardia y defensa.
Es un perro de gran tamaño, musculoso y robusto. Tiene una cabeza grande y maciza, con arrugas prominentes y una mandíbula fuerte. Sus ojos son ovalados y de color oscuro, y sus orejas son de tamaño medio y caen a los lados de la cabeza. Su cuerpo es compacto y bien proporcionado, con un pecho ancho y profundo. La cola es de inserción baja y se lleva baja, alcanzando hasta los corvejones.
El pelaje del Dogo de Burdeos es corto y suave, con colores que van desde el rojo hasta el leonado.
A pesar de su apariencia imponente, este perro es conocido por ser amable, leal y cariñoso con su familia. Es un perro guardián natural, pero también puede ser gentil y protector con los niños. Tiende a ser reservado con los extraños y puede mostrar desconfianza hacia ellos, lo que lo convierte en un excelente perro de guardia y protección.