El Gran Danés, también conocido como Dogo Alemán o Alano, tiene un origen antiguo y su historia se remonta a la época de los asirios, persas y celtas. Sin embargo, la raza tal como la conocemos hoy en día se desarrolló en Alemania. Se cree que fue el resultado de cruces entre Mastines ingleses y Lebreles alemanes. A lo largo de los años, estos perros se usaron para cazar jabalíes, ciervos y osos, así como para proteger propiedades y personas.
En algunos lugares, el término “Alano” se utiliza para referirse a otra raza, el “Alano Español”, que es un perro de presa de origen español.
Es un perro de gran tamaño y musculoso, con una apariencia elegante y noble. Su cabeza es cuadrada y fuerte, con una expresión noble y ojos oscuros. Las orejas son medianas y caen hacia adelante. El cuello es fuerte y el pecho profundo. Su pelaje es corto y puede ser de varios colores, como atigrado, azul, negro, arlequín (blanco con manchas negras), entre otros.
A pesar de su tamaño imponente, el Gran Danés es conocido por ser amable, cariñoso y gentil. Es un perro devoto y afectuoso con su familia. Aunque puede ser reservado con extraños, generalmente no es agresivo sin una razón justificada. Son perros inteligentes y fácilmente entrenables, pero también pueden ser algo tercos. Dada su naturaleza protectora, pueden ser buenos perros guardianes.
